Solo hay una cosa mejor que la cocacola en esta vida....

Dejar que os cuente una de mis historias...
Corría el año 2005...
Se acercaba la fecha del aniversario con (por aquel entonces) novia, por lo que como buen calzonazos que soy, pensé en regalarla un viaje a Paris...
Lo planeé todo hasta el último detalle, hablé con el jefe de su trabajo para solicitarle las vacaciones para ella esos dias sin que se enterara, compré billetes de avion, y tambien de tren desde su casa hasta la mia, ya que ella vivía en Alicante y yo en Madrid... reservé hotel, preparé rutas, incluso compré una cámara de video... y finalmente, le di la sorpresa...
Evidentemente, no soy Matias, y como no me sobra el dinero, una vez que estuvimos en Paris teníamos que tener cuidado de donde comer y donde no, ya que llegamos a pagar 12 € por un café y una cocacola... por lo que un dia compramos en un supermercado cosas para comer, y cogí una botella de cocacola... cuando subimos al hotel y empezamos a vaciar las bolsas, ví que el tapón de dicha botella era amarillo, y pensé - "joder, que asco más grande!!! he pillado cocacola light sin cafeína!!" - pero al examinar más detenidamente la botella, ví que se trataba de COCACOLA DE VAINILLA!!!
Ese viaje a Paris se convirtió en algo mágico desde ese momento... eché a mi novia de la cama, y el resto de noches que pasamos en Paris dormí junto a aquella botella, abrazados, mirandonos, bebiendo....
Hablaba con ella, reíamos, paseábamos, siempre cogidos de la mano mientras mi novia cargaba con las maletas, la camara de video, etc...
Solo tengo buenos recuerdos de aquel viaje a Paris con la botella de cocacola de vainilla... digo con mi novia... el caso es que cuando nos volvimos, y dado que en España no existía nada parecido, decidí aprovisionarme y metí en la maleta unas 3 o 4 botellas de 2 litros de CocaCola de Vainilla, y otras 2 o 3 de CocaCola de Cereza (otra variedad que sí estuvo en España hace algunos años, pero que retiraron de la venta).
El regreso a España fué duro... la vuelta al trabajo no me importó... tener que madrugar tampoco me molestó... no poder ver las maravillas de Paris tampoco me importaba... pero tener que conformarme con CocaCola normal después de haber probado semejante manjar, era algo que no podía soportar... miraba el calendario con horror, pensando en que cada dia que pasaba, mis "reservas" de cocacolas parisinas bajaban, y llegaría el dia en el que las botellas que me llevé se acabarían...
Y ese dia llegó... la última gota de cocacola de vainilla surcó el interior de la botella, llegando al extremo de la misma, donde se detubo unos segundos... como contemplando el mundo desde aquella maravillosa perspectiva, y después se avalanzó hacia mi boca lentamente... yo sujetaba la botella con mi mano, en lo alto, con la boca abierta, esperando a que aquella gota llegara finalmente a mi, pero deseando tambien que no ocurriera nunca, pues era consciente de que sería la última gota de cocacola de vainilla que podría probar....
Finalmente la gota cayó en mi boca, como a cámara lenta, y con los ojos cerrados, saboreé hasta la última molécula de aquella maravillosa bebida.
Un lágrima resbalando por mi mejilla fué mi forma de decir adios a aquel sabor que no podría volver a experimentar...
Pregunté en tiendas, grandes almacenes, etc... busqué en intenet, envié emails, leí archivos, libros... etc... pero fué imposible localizarla... por algun extraó motivo, solo Londres, Nueva York y Paris tienen el privilegio de tener CocaCola de vainilla, y resultaba imposible conseguirla....
Durante meses, vagué por las calles en busca de algo que me alegrara... pero fué en vano... vivía apagado, triste, melancólico... ningun otro sabor me satisfacía tanto como la cocacola de vainilla había hecho... y todo lo que veía me recordaba a ella... carteles de cocacola normal por la calles, rótulos del mismo tono amarillo de la etitqueta de la cocacola en las tiendas, etc...
Pasó mucho tiempo, hasta que finalmente encontré este Club, y me refugié en él... durante meses compartí con vosotros parte de mi vida, mis gustos, aficiones, etc... e incluso llegué a pensar, resignado, que por fin me había olvidado de ella...
Pero nada más lejos de la realidad!! Ella ha vuelto!!! Está aqui!! Frente a mi!! Y no se como voy a reaccionar esta vez....
Homero y Bandit, las únicas personas que sabian mi "aventura" con aquella cocacola, fueron recientemente a Paris... y en un alarde de generosidad y cariño, después de mucho buscar, la encontraron...
Fué el domingo por la noche, en Madrid. Eran las 00:36 de la noche, en la calle Puerto de Porzuna, en el madrileño barrio de Vallekas. Yo no me lo esperaba, pensé, como mucho, que traerian la típica figurita de la Torre Eiffel para poner encima del televisor, jejejeje... pero no... no era eso...
No puedo expresar con palabras la emoción que sentí en el momento de la entrega... recuerdo como mi piel se erizó cuando estreché entre mis brazos aquella botella que tan feliz me había hecho años atras... aún me emociono al escribirlo...
Quiero agradecer desde lo más profundo de mi corazon este regalo maravilloso que me habeis hecho, Bomero y Bandit... ahora que ella y yo volvemos a estar juntos de nuevo, podremos quedar por ahí los 4 para ir a tomar algo, o al cine... en plan parejitas...
Pero sé que no durará siempre, sé que todo lo bueno acaba, y por supuesto esto no iba a ser la excepción... solo espero que cuando ese momento llegue, esteis ahí para ayudarme a superarlo... de momento, no me he atrevido ni a girar el tapón, pero la excitación y la lujuria me pueden... estas 2 noches han sido horribles, ya que hemos dormido juntos, pero me he contenido, y no he bebido aún ni una gota, a pesar de que nuestros cuerpos desnudos se frotaban entre las sábanas (bueno, desnudos del todo no, yo tenía los calzoncillos, y ella la etiqueta y el tapón).
Y para todos los demás, os he querido dejar unas fotos que he hecho esta mañana cuando nos hemos levantado... acaso no es la cosa más bonita del mundo??? Desde aquí te mando un besazo, botellita!!!

Corría el año 2005...
Se acercaba la fecha del aniversario con (por aquel entonces) novia, por lo que como buen calzonazos que soy, pensé en regalarla un viaje a Paris...
Lo planeé todo hasta el último detalle, hablé con el jefe de su trabajo para solicitarle las vacaciones para ella esos dias sin que se enterara, compré billetes de avion, y tambien de tren desde su casa hasta la mia, ya que ella vivía en Alicante y yo en Madrid... reservé hotel, preparé rutas, incluso compré una cámara de video... y finalmente, le di la sorpresa...
Evidentemente, no soy Matias, y como no me sobra el dinero, una vez que estuvimos en Paris teníamos que tener cuidado de donde comer y donde no, ya que llegamos a pagar 12 € por un café y una cocacola... por lo que un dia compramos en un supermercado cosas para comer, y cogí una botella de cocacola... cuando subimos al hotel y empezamos a vaciar las bolsas, ví que el tapón de dicha botella era amarillo, y pensé - "joder, que asco más grande!!! he pillado cocacola light sin cafeína!!" - pero al examinar más detenidamente la botella, ví que se trataba de COCACOLA DE VAINILLA!!!
Ese viaje a Paris se convirtió en algo mágico desde ese momento... eché a mi novia de la cama, y el resto de noches que pasamos en Paris dormí junto a aquella botella, abrazados, mirandonos, bebiendo....
Hablaba con ella, reíamos, paseábamos, siempre cogidos de la mano mientras mi novia cargaba con las maletas, la camara de video, etc...
Solo tengo buenos recuerdos de aquel viaje a Paris con la botella de cocacola de vainilla... digo con mi novia... el caso es que cuando nos volvimos, y dado que en España no existía nada parecido, decidí aprovisionarme y metí en la maleta unas 3 o 4 botellas de 2 litros de CocaCola de Vainilla, y otras 2 o 3 de CocaCola de Cereza (otra variedad que sí estuvo en España hace algunos años, pero que retiraron de la venta).
El regreso a España fué duro... la vuelta al trabajo no me importó... tener que madrugar tampoco me molestó... no poder ver las maravillas de Paris tampoco me importaba... pero tener que conformarme con CocaCola normal después de haber probado semejante manjar, era algo que no podía soportar... miraba el calendario con horror, pensando en que cada dia que pasaba, mis "reservas" de cocacolas parisinas bajaban, y llegaría el dia en el que las botellas que me llevé se acabarían...
Y ese dia llegó... la última gota de cocacola de vainilla surcó el interior de la botella, llegando al extremo de la misma, donde se detubo unos segundos... como contemplando el mundo desde aquella maravillosa perspectiva, y después se avalanzó hacia mi boca lentamente... yo sujetaba la botella con mi mano, en lo alto, con la boca abierta, esperando a que aquella gota llegara finalmente a mi, pero deseando tambien que no ocurriera nunca, pues era consciente de que sería la última gota de cocacola de vainilla que podría probar....
Finalmente la gota cayó en mi boca, como a cámara lenta, y con los ojos cerrados, saboreé hasta la última molécula de aquella maravillosa bebida.
Un lágrima resbalando por mi mejilla fué mi forma de decir adios a aquel sabor que no podría volver a experimentar...
Pregunté en tiendas, grandes almacenes, etc... busqué en intenet, envié emails, leí archivos, libros... etc... pero fué imposible localizarla... por algun extraó motivo, solo Londres, Nueva York y Paris tienen el privilegio de tener CocaCola de vainilla, y resultaba imposible conseguirla....
Durante meses, vagué por las calles en busca de algo que me alegrara... pero fué en vano... vivía apagado, triste, melancólico... ningun otro sabor me satisfacía tanto como la cocacola de vainilla había hecho... y todo lo que veía me recordaba a ella... carteles de cocacola normal por la calles, rótulos del mismo tono amarillo de la etitqueta de la cocacola en las tiendas, etc...
Pasó mucho tiempo, hasta que finalmente encontré este Club, y me refugié en él... durante meses compartí con vosotros parte de mi vida, mis gustos, aficiones, etc... e incluso llegué a pensar, resignado, que por fin me había olvidado de ella...
Pero nada más lejos de la realidad!! Ella ha vuelto!!! Está aqui!! Frente a mi!! Y no se como voy a reaccionar esta vez....
Homero y Bandit, las únicas personas que sabian mi "aventura" con aquella cocacola, fueron recientemente a Paris... y en un alarde de generosidad y cariño, después de mucho buscar, la encontraron...
Fué el domingo por la noche, en Madrid. Eran las 00:36 de la noche, en la calle Puerto de Porzuna, en el madrileño barrio de Vallekas. Yo no me lo esperaba, pensé, como mucho, que traerian la típica figurita de la Torre Eiffel para poner encima del televisor, jejejeje... pero no... no era eso...
No puedo expresar con palabras la emoción que sentí en el momento de la entrega... recuerdo como mi piel se erizó cuando estreché entre mis brazos aquella botella que tan feliz me había hecho años atras... aún me emociono al escribirlo...
Quiero agradecer desde lo más profundo de mi corazon este regalo maravilloso que me habeis hecho, Bomero y Bandit... ahora que ella y yo volvemos a estar juntos de nuevo, podremos quedar por ahí los 4 para ir a tomar algo, o al cine... en plan parejitas...
Pero sé que no durará siempre, sé que todo lo bueno acaba, y por supuesto esto no iba a ser la excepción... solo espero que cuando ese momento llegue, esteis ahí para ayudarme a superarlo... de momento, no me he atrevido ni a girar el tapón, pero la excitación y la lujuria me pueden... estas 2 noches han sido horribles, ya que hemos dormido juntos, pero me he contenido, y no he bebido aún ni una gota, a pesar de que nuestros cuerpos desnudos se frotaban entre las sábanas (bueno, desnudos del todo no, yo tenía los calzoncillos, y ella la etiqueta y el tapón).
Y para todos los demás, os he querido dejar unas fotos que he hecho esta mañana cuando nos hemos levantado... acaso no es la cosa más bonita del mundo??? Desde aquí te mando un besazo, botellita!!!
