Atentos al último coche porque seguro que os suena de algo

En la ruta o en las calles uno se puede matar con cualquier auto, eso está claro. Pero hay ciertos modelos que parecen haber sido fabricados para combatir el sedentarismo y que la gente camine más, por sus fallas de diseño o de fabricación que causaron numerosos accidentes. A continuación, algunos de los peores peligros sobre ruedas de la historia…
1-Briggs & Stratton Flyer (1915-1925)
El Briggs & Stratton Flyer (también conocido como el Smith Flyer) se hizo conocido al ser hasta el día de hoy el auto más barato jamás creado (según libro Guiness de los récords el Briggs & Stratton Flyer de 1922 se vendía entre 125 y 150 dólares), pero muy probablemente también haya sido el más inseguro de todos los tiempos: no tenía carrocería, suspensión, parabrisas ni ningún tipo de protección contra impactos: para abaratar costos era simplemente una especie de banco con cinco (sí, cinco) ruedas de bicicleta y un ínfimo motor de 2 caballos en la parte trasera, como una especie de motor fuera de borda.
Este auto no hubiese estado tan fuera de lugar en los primeros años de la automoción, pero no nos engañemos: aún para los estándares de su época el Briggs & Stratton Flyer era una absoluta porquería.
2-Chevrolet Corvair (1960-1969)
General Motors presentó al Corvair en 1960 como una innovación de la tecnología: el motor estaba atrás y era refrigerado por aire en lugar de agua. ¿Interesante, no? Pero la fábrica cometió errores desde el inicio: adoptó neumáticos demasiado anchos para un auto tan ligero, lo que hacía imprescindible mantener la presión de los neumáticos exactamente como la recomendada de fábrica, de otra forma el manejo se volvería directamente peligroso. Además, cuando GM probó al Corvair en una pista de pruebas, antes de lanzarlo a producción, este se dio vuelta, algo que sería bastante común en este modelo. Ocurre que al tener el motor atrás más del 60 % del peso recaía sobre las ruedas traseras, haciendo que el conductor perdiera el control del vehículo con facilidad.
¿Más problemas? Los gases y humos del vehículo tenían una tendencia alarmante a introducirse a la cabina, lo que causaba que, si las juntas de escape se dañaban, gases nocivos se filtraran al área de pasajeros. Otros defectos de fabricación también ayudaban a esa filtración, como las crónicas fugas de aceite en los tubos de las varillas de empuje, el hecho que los retenes eran de un plástico duro incapaz de soportar el calor generado (normalmente colapsaban al cabo de un año), o los daños en el sello de goma colocado entre el montaje del motor y la carrocería. Otro inconveniente común eran las pérdidas de gasolina provocadas por los diferentes grados de expansión térmica de diferentes partes del motor fabricadas con diferentes materiales (acero y aluminio, por ejemplo), un problema que el Corvair arrastró durante toda su vida.
¿Quieren más? En su libro de 1965, “Unsafe at any Speed” (Inseguro a cualquier velocidad), y en varios artículos previos aparecidos en la revista The Nation, Ralph Nader acusó al Corvair de 1960-63 de tener “un defecto en la suspensión trasera que provocaba una tendencia a sobrevirar”, haciendo su manejo inseguro. Otra crítica de Nader era el diseño de la columna de la dirección del Corvair, de la que decía que, en caso de una fuerte colisión frontal, la rígida columna de dirección del auto podía “penetrar en el cuerpo del conductor”. Sin palabras…
El libro de Ralph Nader...
3-Ford Pinto (1971-1980)
Los comienzos de los años 70 veían al mundo sumido en la crisis del petróleo y los autos que salieron al mercado americano en esa época realmente fueron uno peor que otro. Un ejemplo es el Ford Pinto, que se presentó como opción a autos tan desastrosos como él o peores, como el AMC Gremlin o el Chevrolet Vega.
Básicamente, el Pinto era un auto mal fabricado con muchos errores pero con una falla fatal: un impacto moderado a baja velocidad desde atrás podía ocasionar que el auto estallara en un enorme incendio. El problema fue que el tanque de combustible se colocó (casi sin protección) en el lugar ideal para estallar a un pequeño impacto con el guardabarros. Además, en caso de colisión, otra falla fatal de diseño podía hacer que las puertas se trabaran, convirtiendo al Pinto en una verdadera trampa mortal. Pero esto no es lo peor de esta historia…
Es de público conocimiento (ya que se filtró un memorándum de la empresa) que Ford era consciente en su momento que el problema del tanque de combustible era obviamente un peligro para sus compradores, pero la firma decidió que sería más barato si simplemente pagaban las demandas de las heridas o las muertes que hacer las modificaciones necesarias para solucionar el problema.
Después de que el caso saliera a la luz y de muchas demandas, Ford terminó por hacer un recall de todos los Pinto y añadió algunas piezas de plástico para cubrir objetos afilados cercanos al tanque, que es como ponerle una curita a una pierna gangrenada, realmente…
4-Reliant Robin (1973–81, serie original)
Conocido por sus apariciones en la famosa serie británica Mr. Bean, el Robin surgió como una necesidad de los años 70: no pagaba impuestos porque era visto como una motocicleta y podía manejarse sin licencia para autos si se tenia el carnet habilitante para conducir motos. Con un pequeño motor de 750 cc y muy ligero (450 kg), el Robin destacaba por tener sólo tres ruedas (sólo una delantera), lo cual nunca fue realmente sinónimo de estabilidad…el Robin debe ser uno de los autos con mayor facilidad para darse vuelta: casi cualquier cosa que no fuese dirigirse en línea recta podía hacerlo dar tumbos…
A pesar de todo (y con algunos cortes en su producción) el Robin llegó a fabricarse hasta el 2002, bajo licencia de la empresa B&N Plastics
Un ejemplo de la “estabilidad” del Robin (a lo Clarkson en TG!)
5- Bricklin SV-1 (1974-1976)
Con financiación del gobierno canadiense, el emprendedor Malcom Bricklin fabricó el “deportivo” Bricklin SV-1 a comienzos de los años 70. El auto tenía una carrocería atractiva con puertas tipo ala de gaviota y faros retráctiles, además era impulsado por un V8 Ford de 5,9 litros…suena bien, verdad? Bueno, nada más lejos de la realidad.
El primer problema era que la carrocería estaba hecha de una mezcla de acrílico y fibra de vidrio totalmente incapaz de soportar el calor creado por el motor. Las puertas estaban tan mal hechas y eran tan pesadas que se cerrarían imprevistamente y no sería nada fácil abrirlas. Por si esto fuera poco, entre una horrible caja automática y las restricciones de emisiones, a pesar de su cilindrada su motor V8 no podía alcanzar los 200 km/h y apenas si bajaba los 10 segundos acelerando de 0 a 100 km/h, algo no muy deportivo que digamos.
Poco más de un año después, y con menos de tres mil unidades construidas, el Bricklin dejó de fabricarse. La mayor ironía es que las siglas “SV” del auto simbolizan “Safety Vehicle” o “Vehiculo Seguro”. Sí, claro…
6-Yugo GV (1980-2008)
También llamado Zastava Koral, el Yugo es un auto realmente peligroso. Esta serie de pequeños autos se fabricaron desde comienzos de los años 80 hasta hace relativamente poco (2008) y se basaban en el Fiat 127 (bajo licencia), con una carrocería modificada y un obsoleto motor que tendía a romperse más rápido de lo que uno demora en decir “Yugo”.
El principal (y posiblemente único) factor positivo del Yugo era su bajo precio, pero eso era porque su fabricación era realmente precaria, lo que ocasionaría casi con certeza heridas de gravedad (muchas veces fatales) a sus ocupantes en caso de accidente. Uno de estos casos fue especialmente famoso…
En 1989, Leslie Ann Pluhar murió al volante de un Yugo modelo 87 cuando una ráfaga de viento de 80 km/h fue capaz de tirar su vehículo del puente Mackinac, en Michigan (EEUU). Tras un primer falso reporte de que el auto venía excediendo la velocidad máxima permitida en el puente, una investigación posterior concluyó que Pluhar, al entrar en pánico viendo que se le hacía difícil seguir manejando debido al viento, decidió detenerse por completo. El frenado, combinado con las fuerzas descendentes creadas por el auto en movimiento y la pésima fabricación del chasis del Yugo creó un combo fatal que hizo que el pequeño vehículo saliese literalmente despedido por el aire…
Sacando al Yugo del fondo del puente Mackinac...
Muchos periodistas norteamericanos, al probar este auto, llegaron a la determinación de que el Yugo era un auto “muy difícil de recomendar, sin importar lo bajo que sea su precio de venta”. Y es que el refrán es cierto, lo barato sale caro…
7- Pontiac Fiero (1984-1988)
Coupé fabricada por Pontiac en los años 80, el Fiero era un auto de apariencia deportiva (se asemejaba bastante al atractivo Fiat X1/9 de los años 70) pero poco de deportivo tenía su motor, un cuatro cilindros “Ironduke“, de 2,5 litros y 85 caballos unido a una caja automática de tres velocidades, a pesar de su disposición central (algo novedoso para un vehículo surgido de General Motors).
Pero su falta de potencia no era su principal problema: igual que el Ford Pinto de los años 70 tenía una terrible predisposición a prenderse fuego. ¿Cuál era el problema? Hay varias hipótesis, la más posible es que, como el motor retenía menos aceite que el de un auto normal, si el dueño manejaba agresivamente y no verificaba el aceite con regularidad, una biela fallaba y rompía el block, el aceite se derramaba sobre el motor y esto hacía que se incendiara.
Una versión posterior solucionó bastante el tema de la potencia (el Fiero GT, con 145 caballos y una caja Getrag de 5 velocidades) pero extrañamente, cuando los problemas de incendios parecían solucionados y el auto estaba mejor que nunca, GM decide sacar el auto del mercado en 1988. Al día de hoy se ven muchos Fiero que han sido recarrozados imitando a modelos de Ferrari o Lamborghini, aprovechando su disposición de motor central y que el bastidor y los paneles de carrocería del Fiero estaban simplemente atornillados al mismo.
8- Ford Bronco II (1984-1990)
El Bronco II fue una versión reducida del Ford Bronco, clásica camioneta que la firma del óvalo fabricó durante tres décadas. Este fue un modelo que siempre estuvo plagado de problemas de seguridad, en particular al tener una peligrosa facilidad para perder el control y darse vuelta, incluso en comparación a camionetas similares.
En los archivos de Ford figuran graves problemas de estabilidad incluso durante los test drives anteriores a ser lanzada a la venta, al tomar curvas cerradas a velocidades de entre 30 y 50 km/h. Esto era algo preocupante, por lo que los ingenieros de Ford propusieron hacer el vehículo 5 centímetros más ancho para remediarlo. Pero como esto hubiese retrasado las fechas de producción del mismo y costado mucho dinero, la gerencia de la firma decidió no alargar los autos. Básicamente puso a sabiendas un auto sumamente peligroso a la venta, lo cual fue reconocido incluso por ingenieros de la compañía, cuyos reclamos para enmendar el vehículo fueron ignorados.
Los casos de accidentes con el Bronco fueron demasiados incluso para ser una camioneta con el centro de gravedad alto: un estudio determinó que en 1987 hubo 43 accidentes fatales involucrando a los Ford Bronco II en EEUU comparados con 8 del Suzuki Samurai, uno de sus competidores y una camioneta con una cierta fama para darse vuelta con facilidad aunque, claramente, nada comparado con el modelo de Ford.
En uno de los tantos juicios contra la compañía por este modelo, una corte del estado de Indiana llamó al Bronco II “peligroso y defectuoso”, agregando que “continuar la producción de este producto luego de opiniones en contrario dentro de la misma empresa es la forma más grosera de la indiferencia de las empresas en relación a la seguridad del usuario final” y obligó a Ford a pagar a la familia del damnificado casi 14 millones de dólares, aunque en ciertos casos la cifra a pagar por la firma superó los 80 millones. El Bronco II fue reemplazado por el Ford Explorer en 1990.
9- Ford Explorer I y II generación (1990-2002)
Arriba les conté la historia del Bronco II, del cual el Explorer es su reemplazante. Este fue fabricado pensando en las familias, aunque conservó varias características del Bronco II…incluyendo sus problemas de estabilidad. De hecho, un memorándum interno del prototipo del Explorer (que data de Mayo de 1987) dice que la estabilidad del mismo, de nombre en clave UN46, era “peor que la del Bronco II” pero que “podía corregirse al hacer el vehículo más ancho y más bajo”.
Ford envió inmediatamente a sus ingenieros al campo de pruebas de la firma en Arizona para someter al prototipo del Explorer a ciertas pruebas de seguridad. Al hacerlo, la falta de estabilidad del modelo era similar a la del Bronco II: pruebas de Ford mostraron que el Explorer se daba vuelta en 5 de cada 12 “giros en J”.
Los ingenieros buscaron soluciones por todos lados: cambios en la presión de los neumáticos, cambios en la suspensión…pero nada sirvió. El Explorer sufrió los mismos problemas que su antecesor y se llegó a la conclusión que cinco años atrás: habría que hacer al vehículo 5 centímetros más ancho. Adivinen que hizo Ford: lo mismo que antes, nada. Los Explorer salieron a la venta con el mismo defecto que los Bronco II.
Los juicios se siguieron sucediendo uno tras otro y esta situación quedó de manifiesto en una carta redactada por el gerente de Firestone, John T. Lampe, al dar por finalizado su contrato histórico con Ford:
“Las relaciones personales se basan en el respeto mutuo. Hemos llegado a la conclusión de que ya no podemos proveer neumáticos a Ford debido a que las bases de nuestra relación se han deteriorado seriamente. Esta no es una decisión tomada a la ligera después de 100 años de historia […] Nuestros análisis sugieren problemas significantes con un segmento sustancial de las Ford Explorer. Hemos hecho saber nuestras preocupaciones a su personal, pero se han rehusado tercamente a reconocer estos problemas”
Finalmente en el 2002, después de casi dos décadas de problemas de estabilidad, Ford finalmente aumentó el ancho del modelo sustancialmente, aunque negó que hubiese sido por problemas de estabilidad. Gente con los viejos modelos se sigue accidentando y Ford sigue perdiendo casos por ello en las cortes norteamericanas…
Comparativa de accidentes de camionetas con neumáticos Firestone...
10-Chery Amulet (2003-actualidad)
Basado en la primera generación del Seat Toledo (a su vez, basado en la plataforma A2 del grupo VAG) el Amulet (también conocido como Cowin o Flagcloud) es un pequeño auto chino que, además de en su país, se fabrica en Rusia, Ucrania, Irán y Malasia.
Si lo anterior no te puso los pelos de punta (debería haberlo hecho, realmente), lo siguiente lo hará: la revista rusa Autoreview lo probó bajo los estándares de seguridad de la EuroNCAP y los resultados fueron aterradores, incluso peores que los de otro auto chino, el Brillance BS6, que logró calificación de 1 estrella sobre 5 posibles. En el caso del Chery el frente del auto terminó totalmente destrozado en un choque estándar de pruebas a 40 mph (casi 65 km/h). El video es más que elocuente…
Con un auto asi casi que es preferible ni usar cinturon de seguridad y arriesgarse a salir despedido del auto, porque quedarse en su interior, como lo muestra el video, es igual a una muerte segura…
Lo más bizarro es que existe un Amulet de competición… ¿Quién será el kamikaze que quiera subirse a eso?
Ala, ahi queda eso.
Un saludo.