
El reingreso de los despedidos se comenzará a realizar en función de las bajas de trabajadores que se vayan produciendo en la compañía. La medida afectará algunos de los cerca de 400 trabajadores que, en el expediente, optaron por las bajas incentivadas con preferencia de reingreso.
La reentrada de los trabajadores en el plantilla debía comenzarse a aplicar "transcurridos un mínimo de dos años y antes de que transcurran cinco años desde la extinción del contrato", según recoge el acuerdo del ERE, por lo que el nuevo pacto de Seat con UGT y CC.OO. supone un adelanto de 18 meses.